Algo que ya había expuesto antes, pero desde lo que puede ser otro punto de vista en este momento...
Muchos construyen castillos de cartas empeñados en llegar rápido a la cima. Saltándose pasos y la diligencia que es necesaria para construir estructuras seguras... y en definitiva sin respetar los tiempos de construcción de cada piso.
Algo que és archi-recontra sabido por mi, pero que también he ido re-descubriendo conforme se va desarrollando mi relación con Fran =) Es que... Las pausas y honrar cada momento con el tiempo que merece es infinitamente más recompensante al final, que el solo buscar atajos y caminos aparentemente más cortos para ser "feliz"
Para quien no ha rozado nunca la felicidad existe la concepción que mientras más castillos de cartas pequeños construyas, más aprenderás o más hábil te volveras en volverlos a levantar, sin embargo, un castillo de cartas sin una buena base, solo puede alzarse unos cuantos pisos antes de llegar a un inevitable y anticlimatico fin. Ese momento en que físicamente no tienes más espacio para colocar cartas, en que quizá miras satisfecho tu pequeño castillo, pero no entiendes por que no se siente "más" satisfactorio. Es el mismo momento en que te preguntas ¿Por qué no hice más grande esa base? ¿Por qué no supe aprovechar los momentos concedidos?
Cuando un constructor inexperimentado siente esto... Se vuelve voluble. No sabe si lo que tiene es lo que quiere, o si la única forma de volver a sentir satisfacción ante su obra es el destruirla y volverla a armar.
Las parejas que viven a ritmo de odio y reconciliación por el rush adrenalínico que produce, son un ejemplo de castillos mal construidos. Todos lo hemos visto en otras personas y nos hemos encontrado pensando "¿qué caso tiene seguir así?"
Por último ese Rush, de forma pavloviana, se vuelve predecible. Se necesita un problema cada vez más grande y una reconciliación aún mayor para poder sentir un esbozo de alegría. Cuando la amplitud de oscilación entre reconciliación y problema se vuelve insostenible, es cuando se rompen los puentes fundamentales de lo que hace que dos personas puedan y quieran estar juntas.
También está quien es inteligente y tiene la suficiente visión global para tratar de volver a comenzar y aumentar sus bases y así darle longevidad a su relación =)
Por mi parte... Me demoro cuanto sea necesario, hago las bases lo más firmes posible y me dedico a disfrutar en cada paso, con cada carta colocada. Porque llegar a la cima no es la meta. De hecho... Tener el castillo más grande tampoco lo es...
La verdadera meta es ser feliz, es hacer feliz y sonreir al darse cuenta que " Estoy orgulloso de lo construido sin siquiera estar en la cima" Falta mucho por construir, indudablemente también en algún momento algún alero colapsará ante un movimiento mal hecho, pero mis deseos de hacerte feliz, nuestra perseverancia y empatía, sé que harán de nuestro castillo un lugar donde encontrar tranquilidad, amor y comprensión. Donde podamos sentirnos cómodos siendo nosotros mismos :D
Card Castles... More complex than you ever thought
Kronox
No comments:
Post a Comment